Sin duda fue cuando aprendí que incluso las amistades que más amor y compañía te han dado, pueden fallar. Nadie es perfecto y no todo es blanco o negro. ):

💌 : cartita para julieta. Primero que nada, gracias por todo hermosa julietita, y en respuesta a tu pregunta. Sí, una vez aprendí que no todos los amigos son amigos, es difícil de entender, pero cuando uno aprender a hacer las cosas sin esperar nada a cambio, logra entender muchas otras, así como también el entender que para muchos nuestra compañía es pasajera y que a raíz de ello, no nos ven de la misma manera, siendo etiquetados como amigos, sin realmente serlo, después de mi pequeño —gran error— aprendí esa valiosa lección.

siempre-siempre estoy en constante aprendizaje, pero, siendo algo más personal, aprendí a que debo preguntar antes de suponer y hacerme de muchas ideas que pasan por mi mente.☝🏻

¡Ay! posiblemente sería el día en que mi primera receta salió saladita y aún así toda mi familia debió comerlo, cada error cometido en la cocina, también en la vidita entre elecciones importantes, entre plantitas que no sabía como cuidar bien, me enseñaron a no sólo investigar un poquito más, sino también a ser paciente conmigo misma y avanzar pasito a pasito, a aprender de los demás. Todo ello me ha permitido cultivar mi corazón y espíritu♡.

El no ser tan confiada. He pasado por momentos en dónde me he sentido fatal por confiar demasiado y creer que en algún momento las personas van a cambiar, pero termina siendo todo lo contrario. ¿Lo peor? es que yo sé que eso terminará mal, pero no salgo a tiempo y me termino lastimando yo sola. Es algo que estoy aprendiendo poco a poco; cuesta un poquito.

Creo que hay varios momentos en mi vida en donde he experimentado esa frase pero el momento más significativo fue cuando fui consciente de que no todas las personas piensan como yo y que antes de decir algo debo de pensar en cómo va a afectar a la otra persona, en resumen, pensar antes de hablar.

he aprendido muchas cosas, mayormente a que es normal cometer errores y si cometemos lo mismo dos o tres veces no pasa nada, es normal errar y seguir intentando hasta que las cosas marchen bien.

¡Hola, Julietita!
Siempre he pensado que de los errores se aprende, por más pequeño que sea, hay una enseñanza detrás que nos ayuda a la mejora constante. Tengo un corazón de pollo, más bien de cachorro- y he dejado pasar cosas que a la larga me estaban desgastando, anteponiendo siempre los sentimientos de la otra persona. Mi error fue en confiar que eso algún día cambiaría, hasta que un día aprendí a darle más importancia a mi sentir, a darle más valor y prioridad, a cuidarme y a aceptar mis emociones porque solía bloquearlas mucho, a poner límites.

No quisiera compartir algo en específico pero sí puedo decir que, una vez aprendí que todos cometemos errores, mi vida ha sido mucho más fácil. Solía sentir mucha ansiedad y culparme mucho cuando sabía que había hecho algo mal, pero poco a poco fui aprendiendo que todos los errores tienen solución y que también es de experto y de sabio asumirlo, afrontar las consecuencias, corregirlo y aprender de ello para el futuro. Mi mayor lección es: todo tiene solución, y de todo se puede aprender siempre.

Hubo un tiempo en el que mis miedos me hicieron reaccionar impulsivamente y aunque creo que ya es demasiado tarde, aprendí a no tomar decisiones así de apresuradas (especialmente si son decisiones negativas), a tomarme un momento para mantener la perspectiva y a confiar.<3

Buen día, querida Julieta. ♡

Aprendí bastante gracias a una ruptura, ¿sabes? Hice mi meaculpa respecto a lo vivido, y el gran error que cometí constantemente fue el de ser demasiado complaciente. Bueno, todos hemos querido hacer/dar bastante por la persona que amamos, pero lo mío fue tantito más arriba; me perdí, y me costó encontrarme. No considero que la relación haya sido un error, el error fue continuarla cuando era notorio quién amaba y quién no.

¡Así es la vida! Gracias a la experiencia me volví más cuidadosa. Todo es un aprendizaje.